Cómo afecta la música a nuestra salud

El pasado 13 de julio fue el Día Internacional de rock and roll y para celebrarlo queremos descubrirte algunos de los beneficios que tiene la música en nuestro estado de salud.

Y es que seguro que más de una vez has recurrido a las letras de tus canciones favoritas para desconectar de todo lo que estaba sucediendo a tu alrededor. Nada como la canción de (I Can't Get No) Satisfaction de los Rolling Stones para subirte el animo y darlo todo.

Y es que varias investigaciones afirman que los sonidos del rock and roll aportan varios beneficios a nuestro cerebro.

La Universidad de Warwick demostró que las personas que oyen habitualmente música rock o heavy tienden a tener mayor capacidad para desconectar de todo lo que sucede a su alrededor, liberan mejor sus tensiones y pueden relajarse con más facilidad.

Un estudió de la Universidad de Arizona reveló que los 'heavies' son más felices y encuentran más fácilmente la calma. Además, son menos propensos a tener algún remordimiento. Por lo que en general, tienen mejor calidad de vida, ya que gozan de un mejor estado emocional.

Varios estudios también han revelado que escuchar este tipo de música ayuda a procesar la rabia y el odio.

4. Aumenta tu rendimiento físico

Y, por último, un estudio del Hampden-Sidney College, Virginia, demostró que la resistencia física aumentaba cuando se escuchaba este tipo de música mientras se practica ejercicio.

Pero no solo el rock and roll y el heavy metal aportan beneficios a nuestra salud. La música, en su totalidad, también ayuda a mejorar nuestro estado de salud. De hecho, cada vez más hospitales incluyen la terapia musical en cada vez más tratamientos, ya que:

• Contribuye a reducir el dolor. La terapia musical favorece a la liberación de endorfinas, que actúan como analgésicos naturales. De hecho, existen múltiples estudios que constatan que la música puede reducir el dolor de algunas enfermedades crónicas como, por ejemplo, la artrosis.

• Ayuda en desórdenes neurológicos. La música es como un gimnasio para nuestro cerebro, ya que aumenta la comunicación neuronal, la elasticidad y la plasticidad del órgano.

• Fortalece el sistema inmunológico. Son muchos los estudios que afirman que la música aumenta la producción de plaquetas, estimula los linfocitos y la protección celular ante determinadas enfermedades. Pero eso no es todo, ya que también puede disminuir los niveles de cortisol, los cuales pueden conducir a una disminución de la respuesta inmune.

• Combate el dolor de cabeza. Al contrario de lo que todo el mundo piensa, escuchar música reduce el dolor de la cabeza. Obviamente que el volumen no debe de ser muy elevado para no provocar el efecto contrario.

• Potencia la memoria. Las melodías activan varias zonas de cerebro que son las encargadas de procesar mejor la información. Varios estudios han llegado a la conclusión que escuchar música o tocar un instrumento hace que se comprendan mejor los conocimientos. Un estudio publicado por científicos de la Universidad de Helsinki, concluyen que la música de Mozart activa las partes izquierda y derecha del cerebro, que se encarga del aprendizaje y de la retención de información.

• Reduce la presión arterial. Según una investigación llevada a cabo por la Sociedad Estadounidense de Hipertensión, en Nueva Orleans, escuchar 30 minutos diarios de música clásica o celta puede reducir significativamente la presión arterial alta.